Periodoncia

La enfermedad periodontal o también llamada coloquialmente “piorrea” es la mayor causa de pérdida dental  y los síntomas son el sangrado, la aparición de pus en la encía, mal sabor o mal olor de boca –halitosis-, dolor e incluso movilidad de los dientes.

En la periodontitis, el tratamiento se organiza en dos fases. En la primera fase, también llamada fase de tratamiento, se eliminarán las bacterias de las bolsas periodontales mediante un raspado y alisado radicular, que supone limpiar las bacterias, la placa y el cálculo de las raíces de los dientes. A veces, esta fase del tratamiento se acompaña del uso de antibióticos.

La segunda fase o fase de mantenimiento, que es una etapa fundamental del tratamiento periodontal y la única manera de conseguir el control de la periodontitis a largo plazo con visitas periódicas al profesional.

En el caso de la gingivitis, es necesario limpiar las bacterias que se hayan acumulado, mediante la eliminación de la placa y cálculo dental. Además, es importante aprender unas buenas técnicas de higiene para saber cómo se deben cepillar los dientes y las encías y que no vuelva a aparecer la gingivitis.

¿Debo acudir al dentista si me sangran las encías?

El sangrado de encías es algo muy frecuente pero nunca debemos ignorarlo. Es la primera señal de problemas en la encía y no tratado puede llevar a problemas graves. Una exploración detallada dará el diagnostico preciso y permitirá darle el tratamiento necesario para resolverla y evitar consecuencias más complejas.